Los detectores capacitivos realizan la medida en continuo en función de la alteración de la capacitancia a lo largo de un bulbo (en función de la proporción de bulbo en contacto con el producto) . Son muy habituales las series DLM-35 y CLM-36. Aplicación en líquidos y sólidos granulados. Por su forma constructiva y su aplicación podemos distinguir varios tipos.
Habitualmente la electrónica de amplificación se encuentra instalada en el mismo cabezal de la sonda y incorpora la alimentación, ajuste y salida. Como los modelos DLS35 y DLS27 de nuestra representada DINEL. La programación del 0 y fondo de escala se realiza fácilmente mediante dos contactos magnéticos. La salida analógica puede ser de 4 a 20mA o 0 a 10 Vdc.
Se dispone de electrodos para instalación lateral en tanques. Con una longitud corta o media podemos tener suficiente sensibilidad para detectar el nivel del material y evitar problemas con condensación o materiales adheridos.
Para instalación vertical (en techo de tanque o silo) existen varias versiones. En general los electrodos pueden ser rígidos (para longitudes hasta 2000 mm) o flexibles (formados por un cable de acero flexible y un contrapeso). En este caso el punto de activación del contacto es ajustable en cualquier punto del electrodo.
Como opciones existen versiones que incorporan las siguientes prestaciones:
-Versión ATEX Exia para aplicación en atmósfera explosiva.
-Versión paras alta temperatura hasta 200ºC
-Versiones con protección en FEP, PTFE o PFA